El Drive Pilot de Mercedes-Benz apunta a revolucionar la conducción realmente autónoma pero, ¿quién asume la culpa en un accidente?
Muchos dibujos animados de los 60 y 70 nos mostraban coches voladores, que se conducían solos, totalmente autónomos, después en los 80 incluso series de televisión seguían mostrándonos lo mismo. Y todos pensábamos que era una utopía, es más mucha gente en este momento lo sigue pensando pero Mercedes-Benz lo ha hecho realidad con el sistema DRIVE PILOT.
Pero esto ya no es el futuro, es el presente con el sistema “ DRIVE PILOT ” que Mercedes incorpora a su gama más alta, la serie “S”. Los Mercedes Clase S y EQS estrenan el sistema autónomo DRIVE PILOT. Este sistema te permite una conducción lo más cercana posible a la conducción autónoma que existe en la actualidad; conducción que, de momento, no está disponible por motivos legales en diversos países, y convierte la conducción de la gama
“S” de Mercedes-Benz en un auténtico placer tanto por la seguridad que este sistema ofrece como por su comodidad.
La marca alemana ha sido la primera en obtener la autorización para instalar las funciones de conducción autómata que ya se está comercializando en Alemania como equipamiento opcional, pero no es barato que digamos, ya este sistema DRIVE PILOT ronda los 6.000€.
Mercedes adelanta a su competencia más directa arrancando la comercialización, de momento solo en Alemania, de su sistema de conducción autónoma «DRIVE PILOT». La marca alemana Mercedes-Benz ha superado a BMW, ya que esta tenía previsto su presentación para finales del año pasado en su nuevo SUV eléctrico, pero que por diferentes motivos no ha sido posible. Así Mercedes puede presumir de ser el primer fabricante europeo que tiene licencia para implantar este sistema en sus modelos, motivo por el cual ha decidido implantarlo (como opción) en su gama más alta y lujosa, el Clase “S” de combustión y el lujoso y 100% eléctrico EQS.
Estos son los primeros modelos que pueden equipar esta opción, pero bajo pedido y únicamente cuando se instale directamente en el proceso de fabricación del vehículo.
En la gama de combustión este sistema costará a los clientes 5.000 Euros, y y en la gama de eléctricos será un poco más car, 7.430 Euros.
Este sistema estará disponible en el resto de países de la Unión Europea cuando su legislación lo permita.
Con el sistema DRIVE PILOT las dos berlinas (de momento) podrán asumir la conducción en situaciones específicas de tráfico denso y hasta una velocidad máxima de 60 km/h, siempre con la supervisión permanente del conductor que deberá estar pendiente en todo momento de tomar el control del coche cuando sea necesario. El DRIVE PILOT se encarga de regular la velocidad, la distancia con los vehículos precedentes y el comportamiento dentro del carril, siendo capaz de acelerar, frenar y cuando sea necesario.
Toda la información necesaria para que este sistema funcione se obtiene del sistema de navegación, sistema LIDAR y las cámaras y sensores.
Un dato a tener muy en cuenta es que este sistema solo funciona de día, por razones obvias, y que en caso de peligro y que el conductor no tome el control del vehículo, este, de forma automática inicia la parada de emergencia en desplazándose hacia el arcén con el fin de evitar tanto daños propios como a terceros.
Como decíamos al principio, la conducción autónoma ya no es el futuro, es el PRESENTE.