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La Clase S. El nuevo sedán grande de Mercedes Benz, el mismo modelo que estrenó el ARS y el control de tracción, el ícono de los autos de lujo que ha esculpido en la historia su nombre, como referente de su segmento, otra vez remece hasta sus cimientos en la industria de la automoción, con un auto que supera su propia definición.
La nueva Clase S de Mercedes Benz, ofrece tecnología inédita en varias áreas. Es un auto que explora un nuevo paso en la industria de la automoción, al plantear temas tan trascendentes como la conducción asistida, en este caso conceptualizada como manejo semiautónomo.
Su equipo tecnológico, su concepción como producto y su desarrollo van tan lejos, que parecen replantear la relación conductor – automóvil, de cara al futuro.
Sus características más sorprendentes se inician en eta área. ¿Cómo puede la clase S ofrece una extrema seguridad? Ante esta pregunta, Mercedes Benz hace gala de un despliegue tecnológico radical, integrando en esta generación de su berlina tope de gama, el paquete de Asistencia a la conducción plus, compuesto en parte por DISTRONIC PLUS, con servodirección inteligente y stop & Go Pilot.
Bajo esa nomenclatura se designa la arquitectura compuesta por cámaras, sensores y procesadores que le dan a la Clase S la capacidad de mantener una distancia segura con respecto a otro vehículo precedente, frenando si es necesario, y manteniendo el coche en el dentro del carril al circular en rectas o incluso en curvas ligeras, disminuyendo así el riesgo de accidentes y aumentando el confort de conducción.
Siguiendo con la asistencia al conductor, pensada en optimizar la experiencia de manejo, la nueva Clase S es capaz de tomar el control, por ejemplo, al realizar de manera autónoma frenadas de emergencia, en caso de un impacto inminente por alcance o incluso con un peatón, si es que el conductor no ha reaccionado a las alertas sonoras previas, mediante el sistema BAS PLUS con asistente para cruces y el freno PRE SAFE.
El detector activo de cambio de carril monitorea si se sobrepasan involuntariamente líneas delimitadoras de la calzada advirtiendo al conductor mediante vibraciones en el volante. Si el conductor no reacciona, el sistema puede iniciar una intervención en los frenos de un lado del vehículo y contribuir así a devolver el vehículo a su carril.
Similar reacción se produce si los sensores del control activo de ángulo muerto, detectan peligro de colisión con un vehículo en el ángulo muerto.
El impresionante equipamento de la nueva Clase S de Mercedes Benz, que coordina múltiples sensores, entre los que se cuentan varios tipos de radares y cámaras, ofrece tal sensibilidad que es capaz de registrar todo lo que pase en su perímetro, con trescientos metros de alcance en su zona frontal.
Toda esta información es analizada en tiempo real y alimenta los distintos dispositivos de sus sistemas, que proveen de una conducción inteligente y segura en todo momento. Es el concepto Intelligent Drive, donde los ingenieros de Mercedes Benz depositan no solo la seguridad, sino también el confort de la Clase S.
En este punto se encuentra el nuevo sistema de suspensión que convierte a la nueva Clase S, en el primer auto en el mundo en poder detectar irregularidades y adaptar la amortiguación de cada una de las ruedas, reduciendo considerablemente el movimiento de la carrocería, mediante el sistema Magic Body Control. Algo radicalmente innovador y que puede salvar la viva de los pasajeros.
Y hay más. La lista de innovaciones incluye el uso extensivo de iluminación LED en todo el vehículo, al punto de que ninguna de sus luces tiene ampolletas convencionales. Además, los focos delanteros son capaces de proyectar su haz de manera selectiva para mejorar la visibilidad de obstáculos en el camino.
Climatización, asientos sofisticados eléctricos y programables, y un concepto tecnológico propio del siglo XXI, caracterizan este vehículo. Si desea acceder a la ficha técnica completa de la Nueva Clase S, solo tiene que pinchar aquí.
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